lunes, 21 de julio de 2014

TICs y sus posibilidades para la enseñanza


Como en los demás ámbitos de la actividad humana, las TICs se convierten en un instrumento cada vez más indispensable en las instituciones educativas donde pueden realizar múltiples funcionalidades.

La flexibilización de las instituciones  de educación para adaptarse a las necesidades de la sociedad actual pasa por la explotación de las tecnologías de la información y la comunicación en los procesos de formación. Lograr que esos procesos sean de calidad implica cambios en la concepción de los profesores, alumnos, cambios administrativos en relación con el diseño y distribución de la enseñanza y con los sistemas de comunicación que la institución establece. Todo ello implica cambios metodológicos en los entornos virtuales de enseñanza – aprendizaje hacia un modelo más flexible.

Un entorno de formación basado en las tecnologías de la información y la comunicación, se apoya en decisiones relacionadas con el diseño de la enseñanza desde el punto de vista de la institución, del docente y del alumno, en decisiones que tienen que ver con la tecnología en sí misma y la selección del sistema o herramientas de comunicación más adecuadas.

Los usos de las TICs en los centros educativos y en las aulas


La incorporación de las TICs a la educación está lejos de presentar un panorama tan uniforme como se supone en ocasiones y sus efectos benéficos sobre la educación y la enseñanza difieren de estar tan generalizados como se da a entender algunas veces, en la mayoría de los contextos de educación formal y escolar. Las posibilidades de acceso y uso de estas tecnologías son todavía limitadas o incluso inexistentes. Existen diferencias entre algunos países en lo que concierne a la incorporación de las TICs a la educación y la conexión de los centros educativos a Internet. En algunos países la mayoría de los centros educativos cuentan con un alto nivel de equipamiento y disponen de conexión de banda ancha a Internet, mientras que en otros sigue existiendo carencias enormes en ambos aspectos. Estas  diferencias, además no se dan sólo entre países o entre regiones, sino que  se detectan también dentro de una misma región o incluso en un  país.

El desfase constatado entre expectativas y realidades no puede atribuirse únicamente a problemas de acceso. Ciertamente el acceso del profesorado y del alumnado a las TICs es una condición necesaria que está aún lejos de cumplirse en muchos países, muchas instituciones y muchas aulas, es imprescindible hacer esfuerzos en este sentido. Cuando se dispone de un equipamiento y una infraestructura que garantiza el acceso a las TICs, profesores y alumnos hacen a menudo un uso limitado y poco innovador de estas tecnologías.

Se debe mantener expectativas elevadas sobre su potencial para lograr una mejor enseñanza en el proceso de aprendizaje.

 

Oportunidades de las nuevas tecnologías para mejorar la calidad de la enseñanza.

 
Las TICs por si mismas no van a cambiar la educación, pero pueden ser una herramienta que permita llevar a cabo innovaciones educativas. Estas tecnologías ofrecen nuevas alternativas para la estimulación sensorial, pueden estimular y potenciar la vista, oído, entre otros. Las multimedia interactivas pueden ser concebidas para crear aprendizajes a partir de situaciones próximas de la realidad, pero controladas desde un punto de vista pedagógico. La educación tradicional debe transformarse. Se puede seguir en el aula, pero su fisonomía y dinámica deberán cambiar radicalmente. Se deben tener en cuenta los diversos recursos informáticos que pueden utilizar el profesorado y las posibles aplicaciones educativas de los diferentes recursos. Algunos recursos informáticos son los siguientes: aulas virtuales, educación en línea (redes informáticas), video, conferencias, acceso a bases de datos e información de todo tipo, búsqueda actualizada sobre cualquier tema, entre otros.